Inspección de Consumo realiza más de 2.200 actuaciones en la campaña de «Halloween»

Taller de Halloween, disfraces Disfraces y artículos de broma son el principal objeto de esta campaña Archivo/Fabián Simón

Consumo Aragón recomienda extremar la precaución a la hora de comprar material de broma y disfraces

En su habitual campaña de Halloween, la Inspección de Consumo del Gobierno de Aragón ha realizado este año 2.237 actuaciones que han supuesto la inmovilización de 1.071 unidades. Estas actuaciones han sido realizadas para comprobar la inexistencia de los productos notificados desde finales del año pasado a través de la Red de Alerta, así como por actuaciones de oficio donde los Inspectores han detectar que un determinado producto no cumpla, en su caso, con el etiquetado.

Disfraces y complementos son los protagonistas de estas jornadas festivas. Las normas que regulan este tipo de productos tienen presente que tras esos trajes y caretas se esconde el juego; de ahí que los disfraces destinados a niños menores de catorce años sean considerados como juguetes, elevando de ese modo el nivel de exigencia en materia de seguridad.

En 2024 se han revisado en Aragón un total de 47 referencias de la Red de Alerta, correspondientes a artículos relacionados con esa festividad. La mayoría de ellos se corresponden con disfraces, el resto se trata de complementos o adornos como máscaras, diademas o bisutería.

El riesgo que se suele asociar a este tipo de productos guarda relación con cordones o lazos excesivamente largos, una mayor probabilidad de inflamabilidad, dificultades a la hora de una adecuada respiración o la presencia de piezas pequeñas, en el caso de disfraces para niños menores de tres años.

Para la directora general de Protección de Consumidores y Usuarios, Inma de Francisco, “ante todo, debe elegirse un disfraz adecuado a la edad de la persona que lo vaya a usar y prestar especial atención si va dirigido al público infantil. Cuerdas y lazos excesivamente largos, máscaras muy ajustadas o piezas pequeñas son los riesgos que mayormente presentan estos tipos de productos”

La venta de algunos de los productos es específica de estas fechas, «tendrán que informarnos igualmente de los plazos y condiciones de las devoluciones, si la compra es en un establecimiento físico y así lo ofrecen por política comercial. En el comercio electrónico este periodo es fijado por ley y tenemos 14 días para la realización de la devolución, es lo que conocemos como derecho de desistimiento”, nos recuerda De Francisco.

Puede ser que vayamos a acudir a una de las fiestas organizadas; en el caso de adquirir entradas para fiestas de Halloween conservaremos las entradas, los folletos publicitarios y cualquier otro documento que guarde relación con ese servicio, especialmente la identificación de la empresa organizadora.

En cuanto a los consejos a tener presente, desde la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios, se realizan las siguientes recomendaciones:

  • Todos los disfraces llevan una etiqueta que debemos leer detenidamente. La etiqueta nos informará la edad recomendada, los consejos de seguridad y la empresa responsable del producto, entre otra información relevante.
  • Los disfraces de niños son considerados juguetes, de ahí que sea requisito imprescindible que conste el marcado CE, prueba de conformidad de que el fabricante ha tenido presentes los requisitos de seguridad.
  • Comprobar que son resistentes al fuego o poco inflamables. Las pelucas, barbas y complementos de similares características suelen presentar un alto grado de inflamabilidad. No conviene que sean utilizados por los niños y, en todo caso, ha de tenerse presente esa posibilidad evitando los cigarrillos, mecheros o aproximarse a estufas y otras fuentes de calor.
  • Las caretas y antifaces deben ir provistos de unos agujeros de ventilación adecuados para que el niño pueda respirar bien. Las máscaras muy ajustadas y sin orificios de ventilación pueden perturbar la respiración. Mejor si utilizamos sombreros y/o maquillaje.
  • Los maquillajes deben ser seguros para la piel, adecuados al uso cutáneo. Hay que tener cuidado al aplicarlo en la zona de los ojos, nariz y boca. Hay que leer bien las instrucciones antes de usarlos.
  • Todo lazo o cuerda que quede libre en la parte alta del disfraz, puede suponer un riesgo de estrangulamiento para el niño por lo que evitaremos esos adornos.
  • Los disfraces para niños menores de 36 meses no deben contener elementos pequeños que puedan ser motivo de atragantamiento. Elementos decorativos, botones, etc…, deben ir bien fijados, en su caso.
  • En todo caso, conviene recordar que ante cualquier compra hay que conservar el ticket o justificante de compra para poder ejercer nuestros derechos ante una posible reclamación.

En el supuesto de que tengamos que realizar una reclamación recordamos que, en primer término, hay que trasladarla al responsable del Servicio de Atención al Cliente de la empresa. Los establecimientos físicos dentro de nuestro territorio deben disponer de Hojas de Reclamaciones del Gobierno de Aragón y ponerlas a disposición de las personas consumidoras que las soliciten. Independientemente de la modalidad de compra, están obligados a darnos respuesta en el plazo de un mes. En el caso de que la respuesta no sea de nuestro agrado, o de no recibir respuesta, podremos elevarla ante los servicios provinciales de Consumo

Finalmente recordamos que cualquier consulta puede plantearse ante las Oficinas Municipales y Comarcales de Información al Consumidor, Asociaciones de Consumidores y Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios del Gobierno de Aragón.