Los Puntos Violeta ubicados en diferentes espacios de la ciudad informaron a más de 17.000 personas durante las pasadas Fiestas del Pilar, consolidándose como una de las medidas de concienciación «más efectivas» dentro de la campaña ‘No es no’.
Así lo confirman los datos de esta iniciativa, cuyo balance, un año más, ha sido «muy positivo», apunta la consejera de Políticas Sociales del Ayuntamiento, Marian Orós. En total, entre el 4 y el 13 de octubre, por los ocho puntos violeta, uno más que el año anterior, pasaron 17.205 personas frente a las 13.967 del año anterior.
La mayoría (9.206) se acercaron para agradecer el servicio prestado, lo que refleja que la ciudadanía acoge de manera positiva esta medida, mientras que 7.988 solicitaron información.
Además, este año se han entregado 25.985 unidades del material de ‘merchandising’ con el lema ‘Zaragoza contra las agresiones sexistas’ y ‘No es no’, el mayor volumen distribuido hasta ahora. Destacan sobre todo los tapavasos para proteger las bebidas, que han sido muy bien valorados como medida preventiva por las personas que se han acercado. Además, se han distribuido cuelgavasos, pegatinas, calcamonías, tarjetas…
Este año, por primera vez, los Puntos Violeta han contado con pulseras para detectar sustancias químicas en las bebidas como una medida piloto, que han despertado un gran interés entre las personas que se han acercado a estos espacios. Hay que recordar que no se han distribuido como el resto del material de ‘merchandising’ de la campaña, sino que han sido los propios profesionales los que han realizado el test, ante una persona con malestar o sospecha de que su bebida pudiera estar adulterada.
En total, sólo se han realizado cinco test con resultado negativo. Según el proveedor, las pulseras tienen una duración de cinco años, por lo que se utilizarán en las próximas fiestas o eventos. Como ha recordado Orós, los Puntos Violeta, que se pusieron en marcha en 2018 como espacios seguros, tienen una doble función.
Por un lado, concienciar y sensibilizar a la ciudadanía para prevenir cualquier tipo de agresión, «con el objetivo de que todos pudiéramos disfrutar de unas Fiestas en igualdad, libres y seguras» y, por otro lado, atender los posibles casos de violencia sexista, prestando apoyo a la víctima y derivándola a los recursos necesarios. En este caso, durante las Fiestas del Pilar, se han atendido 11 personas que expresan haber sufrido algún tipo de violencia en algún momento, sin que fuera necesario activar o derivar a otros recursos. Esta cifra se sitúa por debajo de las 26 registradas el año anterior.
Cada Punto Violeta está atendido por dos profesionales con titulación en Trabajo Social, Psicología y Educación Social, con un horario que se adapta a la programación festiva. Los profesionales dispone de smartphone con conexión a internet para poder hacer una recogida de datos, dispositivos de seguridad con geolocalización y herramientas digitales para comunicarse con personas con discapacidad que lo procesen.
Este año se han colocado ocho puntos violeta, uno más que el año anterior, en los lugares más concurridos: Espacio Zity, recinto Ferial, plaza del Pilar, Jardín de Invierno, Estación del Norte, Viral Light, Zgamer y en las foodtrucks de San Pablo. Además, también se han incrementado las horas de atención en los Puntos Violeta hasta alcanzar las 216. Con 53, 5 horas, el Espacio Zity ha sido el que ha ofrecido mayor tiempo de atención, seguido de Valdespartera (43) y las foodtrucks (34).
Presentes en las fiestas de los barrios
Por último, Orós ha recordado que esta medida no se limita sólo a las Fiestas del Pilar, ya que se este año se ha desplegado también en las fiestas de los barrios, gracias al trabajo que se ha realizado desde la concejalía de Igualdad con las Comisiones de Fiestas, y en otros eventos multitudinarios, como el Vive Latino o grandes conciertos.
En definitiva, ha concluido, los Puntos Violeta forman parte de una campaña, que también incluía el protocolo de adhesión y el taxi seguro, y que ha servido para «crear más concienciación, algo que para nosotras es muy importante».
«Ayudan a prevenir y erradicar comportamientos que no son admisibles en nuestra ciudad porque Zaragoza es una ciudad abierta, integradora, donde pretendemos que todos puedan disfrutar en libertad de las fiestas y el ocio», ha manifestado.
Los puntos violeta se incorporaron en 2018 como lugares estratégicos con profesionales especializados para atender a cualquier persona que busque auxilio o protección tras sufrir una agresión sexista u homófoba, acoso o una situación que le genere inseguridad. Difunden recursos para hacer frente a la violencia sexistas y protegen a las posibles víctimas. Están delimitados con carpas viniladas y se informa en ellos de los recursos asistenciales existentes.