
AWS colaborará con el Ayuntamiento de Zaragoza en las obras de protección hidrológica en el entorno del Barranco de la Muerte, así como en la creación de un sistema pionero de monitorización de todos los barrancos del término municipal que generará un modelo escalable a otras ciudades
El Ayuntamiento de Zaragoza y Amazon Web Services (AWS) han suscrito un acuerdo de colaboración público-privada con el propósito de desarrollar una estrategia global y tecnológica en materia de gestión de riesgos ambientales, que incluye la ejecución de actuaciones de protección hidrológica en el entorno del Barranco de la Muerte, así como la creación de un sistema de sensorización y alerta para los 28 barrancos que atraviesan el término municipal de la capital aragonesa. La financiación económica de AWS, repartida en tres anualidades, alcanzará los 13.845.471,66 euros.
Y es que, a raíz de las lluvias torrenciales que se produjeron en Zaragoza en julio de 2023, el Ayuntamiento de Zaragoza se puso a trabajar en dos aspectos. El primero, de la mano del área de Urbanismo, en el estudio y desarrollo de infraestructuras que previniesen el riesgo del comportamiento de los barrancos y, el segundo, a través de Transformación Digital, en buscar y estudiar soluciones para incrementar la resiliencia en la ciudad y reducir riesgos ante fenómenos adversos utilizando la sensorización y la tecnología.
«Llevamos trabajando en este proyecto pionero desde 2023 y, de forma ambiciosa, de la mano de AWS desde mitad de 2024», ha explicado la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, quien ha destacado que «al aprovechar el poder de los datos en tiempo real y el análisis a través de la inteligencia artificial, no solo estamos mitigando los riesgos de inundación, sino que estamos transformando Zaragoza en un municipio faro en Europa, comprometido con la sostenibilidad en las Smart Cities, más resiliente y estableciendo un ejemplo de ciudad inteligente frente a eventos climáticos extremos».
«La experiencia y la tecnología innovadora de AWS revolucionará las capacidades de gestión del agua y prevención de inundaciones en Zaragoza, permitiendo un nivel de protección para nuestros ciudadanos que antes era inimaginable», ha subrayado Chueca durante un acto en el que ha participado junto a Kevin Muller, vicepresidente global de Centros de Datos de AWS, y Suzana Curic, country leader de AWS en Iberia. En este sentido, se ha destacado el papel de AWS como referente en sostenibilidad y que tiene un firme compromiso en la gestión de riesgos ambientales, en promover prácticas sostenibles y en innovar en todas las áreas de la infraestructura global para aumentar la eficiencia y minimizar el impacto ambiental».
Estas iniciativas pioneras público-privadas están diseñadas e impulsadas por el Ayuntamiento de Zaragoza y en ellas se ha contado con la colaboración de distintas administraciones como el Gobierno de Aragón y la Confederación Hidrográfica del Ebro, en un claro ejemplo de cooperación institucional al servicio del ciudadano.
UN SISTEMA DE ALERTA PARA 28 BARRANCOS
Por un lado, Zaragoza y AWS van a implementar un sistema de sensorización y alerta para mitigar riesgos asociados a fenómenos naturales, desbordamientos de agua, deslizamientos de tierra, incendios, temperaturas extremas y otros peligros que puedan afectar a las comunidades aledañas y al entorno natural. Se trata de monitorizar un total de 28 cuencas que engloban 634,64 km² de superficie en el término municipal. De esta manera, la resiliencia de la ciudad frente al cambio climático aumentará gracias al empleo de los datos y la tecnología, que tendrán una vertiente de prevención, pero también de ámbito social, repercutiendo en una mayor agilidad y calidad de la respuesta y vigilancia, con los beneficios que ello conlleva en última instancia sobre la población.
Para lograrlo, Zaragoza pondrá en marcha un sistema inteligente de alerta basado en la nube de AWS que combina la recopilación de datos en tiempo real con redes avanzadas de sensores, servicios internet de las cosas (IoT) y análisis impulsado por inteligencia artificial (IA) que transformará la capacidad de respuesta ante desastres. La plataforma monitorizará constantemente las condiciones meteorológicas y el flujo de agua, permitiendo el mantenimiento proactivo de la infraestructura, la evaluación predictiva del riesgo de inundaciones y la alerta temprana automatizada para coordinar los esfuerzos de respuesta a emergencias.
Para estudiar la ubicación de las estaciones de sensorización se ha analizado el centro geométrico de las cuencas y se han dispuesto con el planteamiento de que se encuentren lo más arriba posible para dar tiempo suficiente a la respuesta, pero que sean descriptivas de lo que ocurre. Las estaciones, algunas de ellas con webcam incorporada, constará de algunos elementos como pluviómetros, databloggers programables, antena y router, y paneles solares, todo ello diseñado para resistir a condiciones hostiles, con autonomía ilimitada, comunicaciones integradas y sin infraestructuras complicadas.
INFRAESTRUCTURA HIDRÁULICA
Por otra parte, gracias a AWS, el Ayuntamiento de Zaragoza podrá avanzar de manera exponencial en las infraestructuras hidráulicas que reduzcan los riesgos de inundación del barrio Parque Venecia, la circunvalación Z-30 y las zonas adyacentes. Para ello, a las obras municipales ya emprendidas del canal perimetral y el muro de contención en la trasera de los edificios del Cuartel de Policía Local de La Paz y del CEIP María Zambrano, se sumarán tres grandes fases de ejecución que aborden de manera global la cuenca hidrográfica del Barranco de la Muerte.
Se actuará para reducir los riesgos sobre la inundación en la Z-30 y las zonas anexas. Para ello se construirán los depósitos de tormentas junto al Cementerio de Torrero, se harán cinco diques de laminación (cuatro en el barranco de la Muerte y uno más en el de Camino de Arráez), y se acondicionarán y mejorarán los diques de laminación superiores aguas arriba de la Z-40 en el barranco del Camino de Arráez.
Además, se soterrará el Barranco de la Muerte en la Z-30 mediante un colector, con el propósito de duplicar la capacidad actual y la eficiencia del sistema de drenaje y mitigando significativamente el riesgo de inundación en esta zona crítica. Supondrá, en definitiva, crear una nueva tubería de alta capacidad que recoja el agua vertida al final del canal perimetral en construcción actualmente para trasladarla fuera del área, a 1,2 km de distancia.