 
El barómetro también refleja que un 84,2 % de los encuestados respalda un incremento de la videovigilancia en las calles
La convivencia, la limpieza de las calles, el transporte público y la seguridad ciudadana se confirman como los grandes asuntos que preocupan a los vecinos de Zaragoza, según el Barómetro municipal del primer semestre de 2025. El estudio, elaborado a partir de 2.025 encuestas telefónicas, revela que el 91,5 % de los zaragozanos considera necesaria la aprobación de una ordenanza cívica para reforzar la convivencia y sancionar las conductas incívicas.
Esta demanda coincide con el anuncio de la alcaldesa Natalia Chueca en el Debate del estado de la ciudad, en el que avanzó la aprobación de una normativa específica para proteger los espacios públicos y consolidar una cultura del respeto. Pocos días después, el 29 de julio, se constituyó el grupo de trabajo encargado de elaborar la futura ordenanza.
El barómetro también refleja que un 84,2 % de los encuestados respalda un incremento de la videovigilancia en las calles, mientras que un 87,7 % considera prioritario modificar la legislación para agilizar los desahucios por ocupación ilegal y garantizar el derecho a la propiedad. En paralelo, el Ayuntamiento ha reforzado la seguridad con la incorporación de 70 nuevos bomberos y 104 policías locales, la mayor ampliación de plantilla en casi dos décadas.
En cuanto a la valoración de servicios, los Bomberos vuelven a ser el mejor puntuado, con una nota de 8,76, seguidos del tranvía (7,59), el servicio 010 (7,46) y la programación de los centros cívicos, las ludotecas y centros de tiempo libre, todos con notas por encima del 7.
Pese a estas preocupaciones, el nivel de satisfacción con la ciudad es muy alto: casi el 95 % de los zaragozanos se declara satisfecho de vivir en Zaragoza, y un 90,9 % asegura estarlo también con su barrio. Los más contentos con su entorno son los vecinos de Casablanca (100 %), Universidad (99 %) y Santa Isabel (98 %).
Entre las prioridades que marcan los ciudadanos para el futuro destacan la construcción de nuevas instalaciones deportivas y de ocio —con proyectos ya en marcha como la Nueva Romareda, el Ibercaja Estadio o el CDM Distrito Sur— y la ampliación de las zonas verdes, con actuaciones previstas en el Parque Tío Jorge y en los terrenos de la antigua estación de El Portillo.
El transporte público, la limpieza y la seguridad aparecen así como los tres grandes retos inmediatos de la capital aragonesa, junto a una creciente apuesta por los equipamientos deportivos y los espacios verdes que marcan la hoja de ruta del Ayuntamiento.
