Aragón pagará 30 euros por cada jabalí abatido para prevenir la peste porcina africana

Un jabalí por las calles de Zaragoza

El Gobierno autonómico aprueba un Decreto-ley con medidas urgentes de vigilancia sanitaria, control de jabalíes y campañas de concienciación tras el foco detectado en Cataluña

El Gobierno de Aragón ha activado un paquete de medidas urgentes para prevenir la entrada de la peste porcina africana (PPA) en la Comunidad tras la detección de un foco en Cataluña el pasado viernes 28 de noviembre. En un Consejo de Gobierno extraordinario, se ha aprobado un Decreto-ley que refuerza la vigilancia sanitaria, la bioseguridad en las explotaciones y la gestión de la fauna silvestre.

Entre las acciones más destacadas, el Ejecutivo autonómico ofrecerá una subvención de 30 euros por cada jabalí abatido, incentivando a titulares de cotos y cazadores para controlar la población de estos animales. Asimismo, se ha autorizado excepcionalmente el uso de visores térmicos, se promueve la captura en vivo mediante cercados tipo NASA y se incrementa la presión cinegética sobre el jabalí.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Javier Rincón, destacó que “estas medidas combinadas nos permiten actuar de forma rápida y efectiva para proteger de la PPA”. Asimismo, subrayó que actualmente no hay casos de PPA en Aragón, ni en fauna silvestre ni en explotaciones ganaderas, y que el objetivo prioritario es impedir la llegada de la enfermedad.

El decreto incluye también campañas informativas dirigidas a ciudadanos y visitantes, con especial atención a la desinfección de vehículos, calzado y material, así como a la notificación de animales muertos en la montaña. Además, se ha reforzado el equipo técnico con veterinarios de SARGA y se ha adquirido material especializado para la gestión segura de cadáveres y residuos.

Por último, Rincón anunció que se ha solicitado al Gobierno central la convocatoria de una Conferencia Sectorial urgente para coordinar una estrategia nacional frente a la PPA, insistiendo en que “la coordinación debe traducirse en un plan real que permita a todas las comunidades actuar con eficacia”.

Con estas medidas, Aragón busca proteger a su sector porcino y al medio rural frente a una enfermedad que podría tener graves consecuencias económicas y sanitarias si llegara al territorio.