Zaragoza protege su arbolado urbano ante los daños provocados por castores en las riberas del Ebro

Un chopo del Parque de Tenerías será apeado por riesgo de colapso tras ser dañado por castores reintroducidos ilegalmente, mientras el Ayuntamiento refuerza medidas de protección y plantación de más de 1.700 árboles este año

Ayuntamiento de Zaragoza procederá esta semana al apeo de un ejemplar de chopo negro (Populus nigra) en el Parque de Tenerías, afectado por la acción de castores y con riesgo de colapso inminente, según los informes de la Sección de Conservación de Zonas Verdes y Arbolado. La medida se toma como precaución, al encontrarse el árbol en una zona de uso lúdico y representar un peligro para los ciudadanos.

Los castores (Castor fiber), cuya presencia en los ríos españoles es fruto de reintroducciones ilegales aunque están protegidos por normativa europea, han causado daños en más de 70 ejemplares de arbolado urbano a lo largo de las riberas del Ebro, el Huerva y el Gállego. Los roedores se alimentan de corteza y troncos, y derriban árboles para construir madrigueras y presas, afectando especialmente a chopos y álamos en entornos urbanos como el Balcón de San Lázaro y el tramo comprendido entre el Azud del Ebro y el Club Náutico.

Desde marzo, la Consejería de Medio Ambiente y Movilidad ha iniciado medidas preventivas en colaboración con la Unidad de Conservación del Medio Natural, colocando mallas metálicas para proteger los árboles más vulnerables. Estas actuaciones se han centrado primero en la margen izquierda del Ebro, en zonas con mayor presencia de castores.

El castor europeo es un roedor herbívoro semiacuático cuya dieta incluye tallos, ramas y corteza de árboles, con preferencia por chopos y álamos en los sotos urbanos de Zaragoza. Su comportamiento de corte y despiece de árboles ha incrementado la necesidad de acciones preventivas y de apear ejemplares en riesgo, así como de reponer el arbolado dañado.

En este sentido, el Ayuntamiento de Zaragoza cuenta con un Plan de Reposición de Arbolado Urbano que contempla la plantación de más de 1.700 árboles en distintos distritos y barrios durante 2025. Las plantaciones se realizan considerando criterios de sostenibilidad, adaptabilidad al clima semiárido y resiliencia del ecosistema urbano, con mejoras en el sustrato y la retención de agua. La primera fase se llevó a cabo entre enero y marzo, y la segunda está prevista entre octubre y diciembre.

Estas acciones se complementan con programas educativos como Adapta tu patio, que este año ha intervenido en varios centros educativos mediante la plantación de árboles, la retirada de hormigón y la creación de pérgolas para mejorar la sombra y la sensación de frescor. Además, se impulsa un nuevo contrato de mantenimiento de zonas verdes en colegios, que incluye poda, siega y cuidado de sistemas de riego y estructuras.

Con estas medidas, Zaragoza busca minimizar los riesgos provocados por los castores, preservar la seguridad ciudadana y garantizar la sostenibilidad de su arbolado urbano frente a las amenazas naturales y antrópicas.