El Salón de Plenos del Ayuntamiento de Zaragoza ha acogido este solemne acto en el que han participado también el consejero de Participación Ciudadana, Alfonso Mendoza, y la concejal delegada de Barrios Rurales, Paloma Espinosa. En él, los alcaldes y alcaldesas de los catorce barrios rurales han recibido la banda municipal, la insignia y el diploma de mano de la regidora. Asimismo, también ha entregado la insignia de plata a los vocales de las juntas vecinales nombrados por los grupos municipales.
En su intervención, Natalia Chueca les ha agradecido la «implicación con sus vecinos y, en definitiva, con toda la ciudad», mientras les ha recordado la importancia del significado de esas bandas e insignias.
«Vuestra labor es fundamental porque sois mis representantes en vuestros barrios y la coordinación entre todos es fundamental para atender las necesidades de cada uno de nuestros vecinos», ha destacado la alcaldesa de Zaragoza, quien añadido la importancia de «estar en la calle y escuchar a los ciudadanos». «Sois los ojos y oídos del Ayuntamiento, pero también sois la voz del Consistorio en los barrios rurales», ha insistido.
De ahí que, tal y como ha explicado la alcaldesa Chueca, este Gobierno municipal decidiera crear una concejalía específica de Barrios Rurales para que «hoy estéis más cerca y más presentes que nunca en la política municipal de Zaragoza». «No hay más que ver el gran número de actuaciones que se han ejecutado y mi compromiso con vosotros, mis representantes, es seguir trabajando en esa misma línea», ha incidido al tiempo que ha recalcado que es «la alcaldesa de todos porque no importa el código postal a la hora de hacer política».
La inversión en barrios rurales así lo refleja con una partida presupuestaria de 4.282.298 euros, un 10% más que el año anterior.
Todo ello se traduce en mejoras del día a día como limpieza y servicios públicos, pero también en conservación del patrimonio como en la Celda del Prior en La Cartuja donde se invertirán 986.690 euros; en la Torre de Santa Engracia en Movera con 580.629 euros; la Harinera de Casetas con 200.000 euros o la segunda fase de los vestuarios del campo de fútbol de Juslibol con 390.000 euros, entre otros. Además, se incluye una partida para pequeñas reparaciones en edificios escolares de los barrios rurales.
Por último, ha manifestado su interés de continuar trabajando juntos durante los próximos años y ha resaltado el trabajo que realizan estos alcaldes, una labor, ha dicho, que implica esfuerzo y vocación de servicio público, aunque «no es muy conocida».
Al término del acto, y una vez en el salón de recepciones, la alcaldesa Natalia Chueca ha posado junto a sus representantes en los barrios rurales en la tradicional foto de familia.
Los alcaldes de los barrios rurales son:
Alfocea: Antonio Aragués Marín.
Casetas: Jorge Eseverri Ariño.
Garrapinillos: Mariano Blasco Lamuela.
La Cartuja Baja: José María Lasaosa Labarta.
Juslibol: Jesús J. Ortega Lozano.
Montañana: María Victoria Berrueta Elías.
Monzalbarba: Joaquín Tiestos Carbonel.
Movera: Esperanza Calvano Gaudés.
Peñaflor: María Carmen López Miguel.
San Gregorio: José M. Alonso Montesinos.
San Juan de Mozarrifar: Erika Fuertes Rodrigo.
Torrecilla de Valmadrid: Carlos Montanel Hasta.
Venta del Olivar: José María Latorre Laborda.
Villarrapa: Luis Ochoa Méndiz.