En su discurso en el Comité de las Regiones, ha abogado por una cobertura justa para todas las regiones, un presupuesto adecuado y reforzar el diálogo con la Comisión Europea
El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha intervenido este jueves en el pleno del Comité de las Regiones participando en el diálogo “Debate sobre una política de cohesión después de 2027 renovada que no deje a nadie atrás». Ha centrado su discurso en las nuevas Políticas de Cohesión post-2027 y ha defendido que estas han tenido un “impacto decisivo” en Aragón, solicitando que los factores de corrección se adecuen a la realidad demográfica y estructural de la Comunidad y de muchas regiones europeas.
“Estos fondos han sido esenciales para que Aragón sea una región más cohesionada, innovadora y preparada para el futuro. Sin embargo, es necesario incluir factores que reflejen adecuadamente la realidad demográfica y estructural de Aragón y otras regiones europeas, como su baja densidad demográfica, dispersión poblacional y ausencia de ciudades medianas”, ha solicitado.
En su discurso, ha destacado que los Fondos de Cohesión, como FEDER, FEADER, FSE+ o Interreg, han sido “esenciales para que Aragón sea una región más cohesionada, innovadora y preparada para el futuro”, pero la no adecuación de esos factores “impediría a nuestra Comunidad el justo acceso a fondos en comparación con regiones del centro de Europa, con un PIB per cápita ligeramente inferior, pero sin problemas de despoblación”.
El líder del Ejecutivo intervenía también como portavoz de EURegiones4cohesion, iniciativa que representa los intereses de 137 regiones de Estados Miembros de la UE con respecto a la futura política de cohesión a partir de 2027, entre las cuales se encuentra Aragón. Ha solicitado tres demandas “esenciales” para la Política de Cohesión post-2027: “Una cobertura justa para todas las regiones, un presupuesto adecuado para afrontar los retos actuales y futuros y reforzar el diálogo entre la Comisión Europea y las regiones”.
Ha defendido que la Política de Cohesión debe “respetar un enfoque territorial basado en la particularidad de cada región”, defendiendo que los gobiernos regionales conocen “mejor las necesidades específicas” y un encuadre centralista sería un “error”. Ha abogado por un presupuesto acorde, que se incremente en otras áreas estratégicas para la Unión Europea, “pero no a costa de la razón de ser de la Unión Europea, la Cohesión”. Además, ha valorado positivamente la propuesta de designar un vicepresidente de Cohesión y Reformas para que, de esta manera, se fortalezca diálogo reforzado entre la Comisión y las regiones europeas.
“En un momento de grandes desafíos históricos, necesitamos que la Política de Cohesión post-2027 sea capaz de responder a los grandes retos a los que se enfrenta nuestra sociedad: la lucha contra el cambio climático, la digitalización, la transición demográfica o la seguridad ciudadana”, ha agregado.
