El Gobierno de Zaragoza ha aprobado una subida salarial adicional del 0,5 % para sus empleados municipales, que se aplicará de forma retroactiva desde el 1 enero de este año.
Este incremento para los empleados públicos está recogido en los Presupuestos Generales del Estado para el 2023. Este documento prevé para 2023 dos aumentos salariales: una subida fija del 2,5 % que ya se aplicó a comienzos de año y que supuso 6,2 millones de euros para las arcas municipales, y una posible subida de hasta un máximo de 0,5% vinculadas a la evolución de la economía, en concreto al IPC.
El incremento adicional estaba condicionado a que la suma del IPC armonizado de 2022 y 2023 (hasta septiembre) superara el 6%, algo que finalmente se ha confirmado, lo que obliga a las Administraciones a aprobar un 0,5 % de incremento retributivo.
De esta forma, la plantilla municipal, además de la subida del 2,5 % del salario que ya se aplicó este año, recibirá ahora una segunda subida adicional del 0,5 % con efectos retroactivos desde enero, que se hará efectivo en la próxima nómina de diciembre.
Este segundo incremento anual supone para las arcas municipales una cuantía de 1.306.442 euros, a los que se suman los 6.207.573 euros de la subida del 2,5 % del primer trimestre del año. En total, estas dos subidas anuales de 2023 ha supuesto un total de 7,5 millones de euros.
Acuerdo para las horas extra
Por otro lado, el Área de Participación y Régimen Interior ha pactado con los sindicatos UGT, CSIF, CSL, Solidaridad-Forzapol, STAZ la subida de las horas extra con efecto retroactivo desde el 1 de enero de este 2023, un avance importante para todos los trabajadores municipales, ya que llevaban congeladas desde 2010.
El acuerdo contempla además vincular la actualización de los servicios extraordinarios de los funcionarios y las horas extra del personal laboral al incremento anual del salario de los empleados municipales que vendrá marcado en los Presupuestos Generales del Estado.
Además, se establece una comisión técnica para conseguir un incremento progresivo y gradual en el plazo de cinco años hasta alcanzar «la proporción de 1,5 horas en los servicios extraordinarios prestados en la jornada diurna y de dos horas en la festiva o nocturna».
