Desde este miércoles 23 de julio y hasta final de septiembre se actuará en la conexión de la avenida con la calle Rioja, lo que supondrá un leve desvío del tráfico rodado que baja por Rioja desde Delicias hacia el cruce
El Ayuntamiento de Zaragoza ha avanza en los trabajos de la reforma integral de la avenida de Navarra, en su segunda fase entre el paseo Calanda y la calle Rioja, y ha alcanzado el 60% de su ejecución, por lo que los plazos se mantienen según el cronograma previsto, terminando así antes de noviembre de este año.
No obstante, el progreso de las obras llegan ahora al cruce entre la avenida y la calle Rioja, lo que conllevará, desde este miércoles 23 de julio a las 8:30 horas y hasta final de septiembre, un leve giro en los itinerarios de la movilidad y el tráfico de la zona.
En concreto, el miércoles se ocupará totalmente el acceso al cruce desde la calle Rioja (sentido avenida Ciudad de Soria o Estación Delicias), desviando a todo el tráfico (incluso bus) por las calles San Antonio Abad y Arias. Así lo harán, por ejemplo, las cuatro líneas de bus urbano Ci1, Ci3, 36 y 42, que no ven modificado su itinerario habitual ni paradas.
También se ocupará la zona central del cruce entre la avenida Navarra y la Rioja, que funcionará como una rotonda hasta la finalización definitiva de toda la obra. El acceso al cruce tanto desde la avenida Navarra (sentido centro ciudad) como desde Rioja (sentido hacia avenida Madrid) quedará reducido a dos carriles de circulación, siendo el derecho únicamente para el giro derecha. Asimismo, los carriles bici de avenida Navarra y calle Rioja en el cruce quedarán interrumpidos.
En estos momentos, los operarios avanzan a buen ritmo en la acera sur tras terminar la acera norte, donde se hizo la renovación de las grandes tuberías de saneamiento que recorrían el subsuelo de la avenida a más de 4 metros de profundidad y se instalaron todos los servicios de riego para la futura zona verde, así como otros servicios.
Esta segunda fase de la avenida supone una inversión global de 5,3 millones de euros. El resultado será incorporar más de 2.300 m2 de zonas verdes y de espacios para los vecinos similares a los que tanto éxito han tenido en la primera fase. Se plantarán 145 árboles, más de 1.400 plantas arbustivas y florales y se instalarán 92 bancos para seguir transformando la avenida de Navarra en una calle mucho más amable y para seguir revitalizando su comercio.
La mejora de la seguridad vial es otro de los ejes de esta reforma. A diferencia de la primera fase, en este tramo se van a elevar los cruces con las calles transversales. De esta forma las aceras tendrán continuidad. Esto dará prioridad a los peatones y obligará a los vehículos a frenar. Además, la calzada pasará a tener dos carriles de circulación por sentido y se creará un carril bici segregado de doble sentido en el eje central, dando continuidad al de la primera fase de la avenida de Navarra.